domingo, 6 de junio de 2021

Mi primer 7k: I Carrera por la Igualdad de Campo Real

Motivado por mi reciente carrera del pollo, me he animado a la I Carrera por la igualdad en Campo Real.


La primera razón para inscribirme fue que era la primera carrera de menos de 10k disponible, la segunda es que el recorrido y tipo de terreno me recordaba bastante al de la Carrera del Pollo que tanta ilusión me hizo correr, por lo que sentía la suficiente confianza como para afrontarla con garantías.

Así que, embutido en mi flamante camiseta de la Carrera del Pollo y con el dorsal 83 en el pecho me dirigí hacia Campo Real. Reconozco que mi primera sensación ha sido de un poco de desilusión, porque mientras que en Moraleja de Enmedio había un excelente ambiente desde bastante antes de empezar, aquí la situación estaba un poco fría.

Se nota que todavía estamos en tiempos complicados, ya que en general había poca gente, mucha distancia y poca animación. sin embargo a medida que se acercan los minutos y comienza a sonar el speaker, se organizan calentamientos organizados y demás, el ambiente se va caldeando.

Del recorrido, me preocupa un poco el inicio que es bastante cuesta arriba y un tramo en torno al km 5 que tiene pinta de ser un rompe piernas. Sin embargo como es una distancia un poco más corta de la que estoy acostumbrado, me siento relativamente seguro de mis posibilidades.

En esta ocasión, salen primero las chicas, con lo que una parte vanidosa de mí piensa que quizás tenga la posibilidad de ser yo el que alcance a alguien en lugar de lo que sucedió la ultima vez, que al salir de los primeros fui rebasado por todo el mundo.

Y cuando me quiero dar cuenta, pistoletazo de salida y como la otra vez, de repente me veo varias docenas de metros detrás del último. Por lo que sospecho que otra vez me va a tocar ir en la cola de la carrera. La primera pendiente me resulta criminal, pero aguanto el ritmo, aunque bajando mucho mis revoluciones y a raíz de ahí el terreno se complica un poco, porque ha estado lloviendo y al ser por terreno no asfaltado hay grandes charcos y barrizales que nos obligan a veces a desfilar en fila india por los laterales del camino.

Este terreno un poco accidentado, me da cierta ventaja, porque hace que la gente delante de mí deba frenarse y me permite acercarme a la cola del pelotón. De esta manera, soy incluso capaz de adelantar a algunos antes de llegar al kilómetro 4. En este momento voy ansioso de la impaciencia ya que en esta carrera hay avituallamiento líquido y me hace ilusión participar de este momento que he visto tantas veces en la tele. Me pregunto cosas muy absurdas como si seré capaz de coger la botella al pasar o si sabré beber sin parar de correr.

Al final, como suele pasar casi siempre, la realidad es más sencilla que el peor de los pensamientos, cojo el agua bebo y como hace bastante calor me vacío el resto de la botella en la cabeza. Descubro, eso sí, que hacer eso, suma a mi camiseta medio kilo de peso por el agua absorbida...Nota mental para mi mismo, no lo hagas más. 

El camino en este momento se vuelve precioso, caminos de montaña entre olivos y gargantas y me siento increíble de estar ahí. Miro mi ritmo y me doy cuenta de que voy alrededor de los 6:30 por km. Un poco más lento de lo que había previsto, pero para ser mi segunda carrera me siento pletórico y siento una vez más la maravillosa sensación de que voy a terminar.

De repente llega una subida que se vuelve infernal y me hace arrepentirme de haber cantado victoria tan pronto. Veo que la gente que va por delante de mí la sube caminando y yo, todo orgullo y poca cabeza, me niego a hacer lo mismo, así que sigo trotando, bajando el ritmo hasta casi los 8 min/km mientras subo en zig zag para tratar de hacerla más ligera.

Cuando llego a lo más alto me arrepiento -y me alegro- de mi proeza cuando veo que todos los que subían caminando salen zumbando cuesta abajo, mientras yo trato de tomar aliento y encontrar mis pulmones que han debido quedarse por el camino. Me siento orgulloso de no haber tenido que parar, pero en cuestión de tiempo, me ha salido caro.

Soy consciente de que estoy en el último kilómetro y de que ya es todo cuesta abajo, así que me dejo llevar, aprieto los dientes -y el paso- y me encaro a la meta.

Me encanta el subidón de escuchar al speaker decir mi nombre y comentar que llevo la camiseta del pollo mientras cruzo la meta puño en alto. (En mi cabeza a toda velocidad, en las fotos... casi caminando)

Al final 46 minutos 24 segundos para 7 km, un ritmo de 6:38 y la satisfacción de no ser el último, ni el último hombre, ni siquiera el último de mi categoría.

Para la colección, mi segundo dorsal y mi primera medalla finisher. Ahora, ¡A por la próxima!

jueves, 3 de junio de 2021

Review Smartwatch: Garmin Vivoactive 4

 Garmin Vivoactive 4

Después de mis anteriores experiencias, empecé a pensar que lo barato sale caro y si bien el ONMOVE 500 HRM se comportaba lo bastante bien, especialmente para su precio, la experiencia negativa con el Amazfit GTR 2 me hizo darme cuenta de que si lo que quería era un reloj deportivo sólido y potente me iba a tocar rascarme el bolsillo.

En ese momento comencé a valorar de nuevo las marcas más conocidas: Polar, Garmin, Samsung, etc... sin embargo al revés de lo que hice la otra vez, comencé por buscar los smartwatch mejor valorados por las prestaciones de su GPS. A partir de ahí fui acotando la búsqueda por el precio máximo que estaba dispuesto a pagar y porque tuvieran algún que otro extra interesante.

Al final mi búsqueda se redujo a:

- Polar Vantage V2

- Garmin Forerunner 245 Music

- Garmin Vivoactive 4

El más ventajoso por precio era el Polar, pero me daba un poco de rabia que no tuviera la posibilidad de descargar música, ya que me parecía una maravilla poder salir sin depender de un móvil o de un mp3 para ello.

El que más se ajustaba a mis necesidades era el Foreruner 245 music, ya que es un modelo específico para correr y tenía la posibilidad de descargar música. Sin embargo era un pelín más caro que el Vivoactive 4.

Al final opté por el tercero, que si bien tiene menos opciones para los corredores que el Foreruner diseñado específicamente para ello, sí que incluía la opción de descargarse música, tenía muy buenas valoraciones en su GPS y tenía la opción de Garmin Pay con el que evitaba ya no solo llevar el móvil sino también la cartera en caso de emergencia.

Cuando llegó a mi casa un par de semanas más tarde, confieso que lo primero que sentí es un pelín de decepción, ya que no era ni la mitad de bonito que el Amazfit GTR 2, la pantalla se veía poco brillante y los colores me recordaban a las viejas pantallas EGA de los 90 en verdes turquesas muy poco atractivos.

A pesar de ello me obligué a recordar que mi objetivo era tener un reloj deportivo con métricas decentes y salí tan pronto como pude a rodar con él. Mis primeras sensaciones fueron que no era tan rápido posicionándose como esperaba, pero sí me gustó que lo que veía en la pantalla se ajustaba a un trazado que ya conocía de memoria y de hecho cuando llegué a casa y descargué la sesión descubrí que las medidas habían sido tan precisas como esperaba.

Había leído alguna crítica acerca de que no siempre vinculaba bien con auriculares bluetooth o que perdía señal, pero en mi caso, no he tenido ningún problema incluso utilizando auriculares baratos. Ha vinculado siempre rápido y bien y con muy buena calidad de sonido. Así que la decepción fue quedándose muy atrás.

Con algunas configuraciones adicionales hasta pude cambiar algunos colores del interfaz y mostrar un diseño más agradable, pero sigue sin ser su fuerte.

En resumen.

A favor: 

  • Es un smartwatch deportivo lo bastante elegante para usarlo en la vida real. 
  • Es eficiente en sus métricas, el GPS funciona perfectamente.
  • Es compatible 100% con Strava, 
  • La posibilidad de tener música y tarjeta bancaria en tu muñeca es muy cómoda (ojo, apenas es compatible con ningún banco, en próximas entregas os contaré como lo conseguí)

En contra:

  • La interfaz no es especialmente bonita ni cómoda.
  • La calidad de la pantalla no es muy buena, ni desde el punto de vista del control táctil, que no funciona muy bien si no tienes la mano impecablemente seca (no suele pasar en mitad de un entrenamiento) ni del físico, ya que se ralla con mirarla. Cualquier roce deja marcado el cristal.
  • Garmin Pay no es compatible con casi ninguna entidad bancaria. Ver solución.
  • Le falta más detalle y funcionalidades en el modo running, aunque es algo que Garmin hace de manera premeditada para dejar todas esas funcionalidades para el Foreruner como factor diferencial.
  • Poca autonomía. Usando el GPS y la música la batería no dura ni un día.
A pesar de lo mencionado estoy bastante satisfecho con mi compra, ya que aunque tiene sus desventajas, creo que cumple con las necesidades previstas.

Puntuación: 8/10

Funcionalidad: 7/10
Precisión GPS: 9/10
Batería: 8/10
Estética: 8/10

miércoles, 2 de junio de 2021

Review Smartwatch: Amazfit GTR 2

Amazfit GTR 2

Después de varias carreras y de tratar de exprimir al máximo mi flamante ON MOVE 500 HRM y tal y como comenté en el post previo, descubrí que a pesar de se run smartwatch barato y muy resultón, se quedaba un poco corto para mis ansias de saberlo todo.

Entendedme, es natural, llevo poco en el mundo corredor y aún estoy en la fase en la que todo me hace ilusión, así que quería medir cada metro recorrido, cada latido, cada segundo de variación en el ritmo y de intentar encontrar mi mejoría en cada día. Si mirar el reloj a cada segundo me hubiera hecho un mejor corredor, en este momento sería un Carl Lewis de la vida, pero lamentablemente no es así.

El caso es que llegado a este momento en que ya había corrido mi primera carrera popular, estaba preparando la segunda y comenzaba a verme a mí mismo como un corredor de pleno derecho, decidí que era hora de jubilar a mi querido y viejo smartwatch (un año y ... ¿30 entrenamientos quizás?) y darme un capricho. Así que me puse a rastrear el mercado: Unos decían Polar, otros Garmin, otros Fitbit, ... y en esas estaba, cuando Amazon que es más listo que el hambre, detectó mis ansias consumistas y empezó a bombardearme con publicidad de un smarwatch de una marca para mí desconocida: Amazfit.

-Ah, claro, pensé yo -debe ser un smartwatch de Amazon y de ahí su nombre y que me saliera hasta en la sopa. Pero no, resulta que es el nombre de los modelos de smartwatch de Xiami y como mi experiencia previa en productos Xiaomi no era mala en cuanto a que suelen ser razonablemente buenos, bonitos y baratos, empecé a investigar.

En mi investigación me brillaron los ojitos con el Amazfit GTR 2. Me parecía elegante, sofisticado, con un look un poco más cuidado que otros relojes deportivos, millones de opciones, posibilidad de descargar música y hasta termómetro medidor de la temperatura corporal, que en tiempo de Covid sonaba muy interesante... Además empecé a leer opiniones y todas eran maravillosas. Que si la batería dura años, que si es muy rápido... total que al ver la diferencia de precio frente a las marcas más convencionales decidí darle una oportunidad.

Descubrí que a través de su página web salía incluso más barato que por Amazon y unos 15 días más tarde lo tuve en casa.

Reconozco que fue amor a primera vista, estéticamente es muy bonito, líneas muy finas, pantalla enorme, muy intuitivo de utilizar y ya me moría por salir a la calle a correr... y eso hice.


el Amazfit GTR 2

Frente al tiempo de casi 5 minutos que tardaba el smartwatch de Decathlon en coger la señal de satélite, los pocos segundos del Amazfit GTR 2 me parecieron como viajar al futuro y la sonrisa brillaba en mi cara... y me duró como 30 metros.

A partir de ahí mi muñeca se convirtió en el baile de San Vito porque cada aproximadamente 100 metros perdía la señal GPS y me vibraba para notificarme de sus idas y vueltas... total que me propuse ir por el recorrido más despejado del mundo, sin árboles, ni edificios y conseguí que los cortes fueran menos frecuentes.

Cuando llegué a casa y vi mi recorrido descubrí que tenía boquetes en las medidas de más o menos 100 metros de cada 1000, es decir, un 10% del trayecto no existía. Comencé a buscar por internet y encontré otras mil reseñas que lejos de las bondades de las primeras que encontré, resaltaban que efectivamente el GPS de ese reloj era un desastre y que si querías un Amazfit con un buen GPS optaras por el modelo T Rex. Pero la verdad es que me parecía más un reloj de montañero que lo que yo pretendía encontrar.


El Amazfit T-Rex

Como no me resignaba a perder mi fastuoso reloj probé a resetearlo mil veces, a tocar todas las configuraciones habidas y por haber, a dejarlo posicionándose durante más tiempo e incluso a buscar rutas aún más despejadas, pero fue en vano, mis carreras tenían más agujeros que mis calcetines.

Sinceramente, no las tenía todas conmigo a recuperar el dinero, más aún porque ya lo había usado media docena de veces y se especificaba que solo se devolvería si se entregaba en el embalaje original y sin usar. Así que resetee una vez más el reloj, lo limpié, lo envolví como si me fuera la vida en ello y lo mandé de vuelta con una carta demoledora en la que explicaba con todo lujo de detalles que:

1) El reloj no servía para correr porque el GPS no funcionaba y adjunté detalles de mis carreras.
2) El termómetro corporal no funcionaba porque no conseguí ni una sola vez superar los 30 grados y o estaba muerto o era más malo que pegarle a un padre.

En ese momento, como seguía sin estar seguro de poder recuperar el dinero, hasta me ofrecí a que me lo cambiaran por un T Rex y pagar la diferencia, ya que pensé que en el peor de los males, funcionarían las métricas que era el motivo de mi compra.

Sorprendentemente, me respondieron dándome todo tipo de facilidades tanto por e-mail, como una vez recibido el reloj, devolviéndome el importe íntegro en menos de una semana. Así que por esa parte, punto a favor de amazfit, el producto no es bueno, pero sí el servicio.

En resumen.

  • Si queréis un smartwatch bonito, os lo recomiendo.
  • Si queréis un smartwatch con millones de aplicaciones y deportes incluidos, también.
  • Si lo que queréis es medir cualquier cosa con él, no vale la pena, porque incluso para alguien que valore poco las métricas, la pérdida de un 10% de las distancias desvirtúa absolutamente todo, ya que intenta reconstruir el trazado en base a las pocas muestras que es capaz de ubicar haciendo que de repente saltes en el espacio-tiempo con ritmos de 1:30 el kilómetro o por el contrario al no poder avanzar te pone un ritmo de 15 minutos por kilómetro.





Aquí un ejemplo de las métricas, donde tengo picos absurdos a un ritmo de 1:09 y desde luego nunca había visto tantas variaciones de ritmo como las obtenidas por este reloj.

Puntuación: 6,75/10

Funcionalidad: 7/10
Precisión GPS: 4/10
Batería: 7/10
Estética: 9/10

martes, 1 de junio de 2021

Review Smartwatch: ONMOVE 500 HRM

ONMOVE 500 HRM

En mi primer post, comenté que una de las cosas que hice, fue equiparme con todo lo que pude pagar en el maravilloso mundo del deportista amateur, que es Decathlon. 

Una de las cosas que adquirí, fue un smartwatch con pulsómetro y GPS, el ONMOVE 500 HRM de Decathlon, que compré simplemente porque no era ni el más barato, ni el más caro y simplemente sabiendo que quería que tuviera GPS porque me hacía ilusión poder ver mis rutas al llegar.




Ahora que ya hemos corrido juntos algunos kilómetros y nos vamos conociendo, puedo decir que aunque cumple perfectamente los requisitos en cuanto a calidad precio de un principiante, se queda un poquito corto si eres un fanático de las métricas como yo.

No me malinterpretéis, teniendo en cuenta su precio -en torno a los 70 €- me parece que cumple más que de sobra con todo aquello que un corredor inicial pueda necesitar.

- Tiene GPS.

- Tiene pulsómetro.

- Puedes configurar distintas actividades, carrera libre, series, ...etc.

- Puedes medir en carrera varios parámetros como tiempo, distancia recorrida, pulsaciones, ritmo

- Su aplicación es compatible con Strava.

De hecho me sorprendió que sus medidas de GPS e incluso del pulsómetro en comparación con otros de mayor precio fueran bastante precisas.

Eso sí, a medida que he ido acumulando carreras y algo de experiencia me he dado cuenta en primer lugar de cuánto tarda en posicionar el GPS. Según la zona en que me encuentre, puede tardar hasta 5 minutos en estar disponible, siempre y cuando me quede -además- quieto como una estatua. Intentar posicionarlo caminando, cerca de un árbol o de un edificio es misión imposible, eso sí, una vez que lo coge es muy estable y como ya he dicho, con medidas ciertamente fiables.

Por otro lado, no solamente tarda mucho en posicionar, sino que cuando lo hace, -salvo que estés un rato adicional parado-, la métrica de los primeros metros es muy imprecisa. Es cierto que esto es algo que puede suceder con cualquier GPS, donde no solo importa cuánto tarde en triangular, sino en mantenerlo en los primeros desplazamientos, pero en el caso del ONMOVE 500, suelo salir siempre con unos 500 metros erróneos.

Lo malo que tiene esto, es que al teletransportarte esos 500 metros en el espacio, distorsiona por completo cualquier medida de distancia o ritmo en el primer kilómetro, por lo que sé que en cada carrera, no veré métricas fiables hasta que no vaya añadiendo kilómetros y el error se difumine.

Si tienes suerte y el posicionamiento inicial es bueno, el salto no suele ser tan grande, pero habitualmente cuento con que mis primeros metros los hago a un -formidable, pero lamentablemente falso- ritmo.



Esto es una muestra de cómo suelen ser mis salidas, con unos ritmos iniciales apabullantemente rápidos, que se van ajustando a medida que el GPS se centra, haciendo siempre que mi ritmo en el primer kilómetro se parezca a la realidad como un huevo a una castaña.

En consecuencia, recomendaría el ONMOVE 500 a todos aquellos que no precisen datos extra fiables y que busquen un GPS que trace bien las rutas, mida relativamente bien las distancias a partir del salto inicial y permita controlar ritmos y tiempos.

Es cierto que no es especialmente estético y solo me lo pondría para salir a entrenar, pero me pareció un producto sólido, relativamente fiable, de funcionamiento muy sencillo y muy por debajo del precio de productos de calidades semejantes aunque con estéticas quizás más cuidadas.

A mí me sirvió muchísimo para motivarme en mis primeros recorridos, especialmente exportándolos a Strava, ya que la aplicación nativa de Decathlon no ofrece muchos datos de interés. No obstante, como fanático de los datos, el escalón inicial me condicionaba mucho a tenerlo encendido desde un rato antes para que cuando empezara mi entrenamiento real ya estuviera posicionado y poder ver bien mis evoluciones.

Puntuación: 7/10

Funcionalidad: 6/10
Precisión GPS: 8/10
Batería: 9/10
Estética: 5/10